Álvaro Dantart: Internacionalizar la educación superior con unos y ceros

Álvaro Dantart: Internacionalizar la educación superior con unos y ceros

martes 14 de julio 2020
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Madrid, julio de 2020

Recuerdo la respuesta que un destacado profesor dio en una clase a la que asistía al ser preguntado por la diferencia principal entre dos reconocidas escuelas de negocios europeas: “Una es más SCHOOL, y la otra es más BUSINESS” fue su respuesta. Reflejaba a la perfección las dos grandes orientaciones que nos podemos encontrar en el sector de la educación superior.

Cuando analizamos un objetivo tan importante que hoy en día nos marcamos todas las instituciones de educación superior como es la INTERNACIONALIZACIÓN, tenemos que saber diferenciar entre aquellas instituciones más SCHOOL, y que con este objetivo buscan un incremento de la calidad de la formación que ofrecen a sus alumnos mediante el enriquecimiento de las materias; un aumento de las posibilidad de inserción laboral posterior al aportar un conocimiento mucho más amplio de la situación profesional a nivel global; un aumento de las habilidades blandas interculturales de sus alumnos; o simplemente más BUSINESS y buscan una vía para aumentar su cuenta de resultados. Y no quiero decir que ambos objetivos sean opuestos, pero sí que es cierto que debemos apostar firmemente por cumplir con indicadores de internacionalización “SCHOOL” que ofrezcan un valor añadido de calidad a nuestros alumnos en su formación y preparación profesional.

Desde el Servicio español para la Internacionalización de la Educación Superior enfocan la internacionalización con acciones de movilidad -tanto de estudiantes como de docentes- así como con acciones de programas conjuntos entre instituciones internacionales. Una visión muy tradicional y fomentada en Europa con el programa ERASMUS, y que hoy en día tenemos que hacer evolucionar por obligación y estar dispuestos a hacerlo. Jocelyn Gacel-Ávila (Universidad de Guadalajara, México) expuso un término muy interesante en un webinar organizado por la Organización Universitaria Interamericana el pasado abril, definiendo que la IES de Latinoamérica deben profundizar en la internacionalización desde casa. Un término que considero lleva aparejado obligatoriamente el uso de las (nuevas) tecnologías para conseguirlo.

Hay quien ve en esta nueva situación un freno en las oportunidades futuras de internacionalización para nuestros alumnos. Pero realmente nos encontramos con que todos los profesionales nos estamos adaptando a esta nueva situación en donde reuniones, seguimiento de tareas, negociaciones, etc, las estamos realizando con ayuda de videoconferencias, de programas informáticos de gestión de proyectos, etc. Y por lo tanto qué mejor aprendizaje en las universidades y escuelas de negocios que aportar a los alumnos estas habilidades digitales para un futuro inmediato en el que es obvio necesitarán de ellas para crecer profesionalmente.

Si deseamos proponer las mejores herramientas y dar un valor añadido en nuestros programas de formación sin dejar de fomentar la internacionalización de la educación superior, debemos apoyarnos en los entornos digitales, virtualizar contenidos para facilitar el aprendizaje práctico a nuestros alumnos y no solo eso, sino que debemos fomentar el intercambio docente, los grupos de investigación, la organización de programas-diplomados conjuntos y la realización de prácticas
empresariales todo en modalidad virtual, sin dejar de lado la presencialidad siempre y cuando la situación sanitaria nos lo permita.

La propia Organización Universitaria Interamericana ha desarrollado el Espacio de Movilidad Virtual en la Educación Superior con el que pretende dar respuesta con programas o asignaturas en línea para adaptar la movilidad tradicional a la nueva situación. Algo que desde muchas instituciones llevamos años trabajando con gran éxito, la movilidad virtual internacional que, a un coste mucho menor para los alumnos, cumple con gran parte de los beneficios que se busca con la
movilidad tradicional y enriquece el proceso de formación al potenciar las habilidades digitales de los alumnos, tan demandadas en todos nosotros en las últimas semanas.

El 27 de junio el diario español El País ha publicado una información sobre el futuro de la educación en donde destaca la necesidad de crear colaboraciones entre instituciones para transformar digitalmente la educación: “las colaboraciones entre universidades en América pueden ser el espejo en el que se miren el resto de centros del mundo. En EE UU, la Arizona State University se ha unido a otros 20 centros superiores con el fin de llegar a acuerdos con plataformas externas para integrar diferentes tecnologías, porque ninguna de ellas podía asumir el reto de la transformación de forma independiente”.

La Red Colombiana para la Internacionalización de la Educación Superior RCI, alianza que promueve procesos de internacionalización en sus Instituciones miembro, enfoca su próximo congreso anual LACHEC 2020 que se celebrará en el mes de agosto y por primera vez en modalidad virtual, bajo el título Reconfigurando la Educación Internacional. Esperamos que salgan muchas niciativas y se presenten buenas prácticas que se hayan ejecutado en este sentido.

Compartir estas buenas prácticas es más que nunca necesario, y debemos borrar todas las barreras tradicionales que muchas IES tenemos en los procesos internos para ejecutar estas nuevas acciones. Debemos superar los obstáculos normativos, financieros y de certificación (la red NARIC ya está trabajando en el reconocimiento online de estudios) sin perder nada de calidad en la formación.

Muy consciente de la situación, el Consejo de Educación Superior del Ecuador acaba de publicar una nueva resolución en el mes de junio a través de la cual va a facilitar a las universidades el cambio total o parcial a la modalidad en línea de los estudios que tengan aprobada en las carreras o programas. Un escollo menos que en muchos países nos encontramos para dar este gran salto que necesitamos. Y es algo que todos los organismos regulatorios de la educación superior van a tener
que hacer, ya que no son pocas las instituciones, por ejemplo en Colombia, que están anunciando la impartición de los programas en el segundo semestre de 2020 en modalidad virtual por completo.

Fernando Téllez, actual director internacional de la Fundación Universitaria del Área Andina de Colombia, recalcaba precisamente en un foro de LACHEC celebrado en Medellín hace tres años la necesidad de que la normativa facilite la cooperación, como unos de los requisitos para una verdadera internacionalización de la educación superior. Ahora debemos ver cómo afrontar ante las normativas nacionales una nueva realidad que nos viene como es la implantación de la
alternancia de modalidades en un mismo programa durante un curso.

Quienes nos dedicamos a desarrollar proyectos en donde es fundamental generar una confianza total entre las partes y donde la negociación presencial es imprescindible, se nos hace muy duro afrontarlo con una pantalla por medio, pero qué mejor que poder dar ese ejemplo para proponer actividades de internacionalización entre las instituciones de educación superior.

Álvaro Dantart
Director de Relaciones Internacionales
EUDE Business School

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